LUCHA

Ve dando la pelea. 
Si peleas con todo lo que tienes, la mayoría de las veces, no seguirás cayendo, en absoluto. 
Tu ganaras. 

Para esto tienes que incorporar esa mentalidad y actitud de lucha como parte de tu vida diaria.

Haz la repetición extra.
Corre la milla extra.
Da una vuelta extra.
Toma las decisiones correctas.
Dalo todo.

Hazte más fuerte, mental y físicamente.

Párate y pelea.

Lucha contra la debilidad. 
Contra el miedo
Contra el tiempo 
y contra la descomposición.

LUCHA Y DEFIÉNDETE. 

Sigue dando pelea.
Da cada día todo lo que tienes.

Y cuando te enfrentas a un desafío, incluso a algo que crees que no puedas ganar, 
o una situación en la que sabes que no puedes ganar, recuerda esto:
                                                                  No tienes nada que perder.

Entonces.

LEVÁNTATE Y AVANZA.

Sal en un resplandor de gloria, luchando con todo lo que tienes, 
reflejado en cada gramo de tu energía, cada gota de tu sudor, 
cada gota de tu sangre, hasta tu último aliento.

Y luego -y solo entonces- puedes retirarte, 
dejar tu espada y tu escudo, 
y descansar: en paz.

FUENTE: “Discipline Equals Freedom, Field Manual” By Jocko Willink